El Trail 7 Playas es una de las carreras que tengo apuntada en el calendario como imprescindible. El hecho de celebrarse en San Fernando, cerca de El Puerto de Santa María, y discurrir por la playa y los senderos que rodean a las marismas la hace muy apetecible.

Las ediciones anteriores definían 2 pruebas, de 26km y 55km, compartiendo parte del recorrido. En participaciones anteriores me decanté por la de 26km, por considerarla más adecuada a mi preparación y nivel. Este año, unido al cambio de organizadores, se ha cambiado el formato de la prueba, pasando a disputarse una única prueba de 35km. Una distancia intermedia entre los 26km y 55km que suponía un reto para mí.

Aunque este año ya he participado en el maratón de Sevilla, no estaba llevando una buena rutina de entrenamientos por lo que mi rendimiento y el sufrimiento asociado era una incógnita. Tras la carrera de las 7 Colinas de Tartessos tuve que realizar una pausa obligada por una irritación en la zona de la pata de ganso. No fue a mayores, pero me obligo a guardar reposo en lo referente a correr,  completando únicamente dos entrenamientos en 15 días.

Los entrenamientos posteriores no fueron buenos, con malas sensaciones y falta de ritmo. Como guinda al pastel de despropósitos, en la semana de la carrera me hice una rozadura en el tobillo debido a un calcetín que se me rompió entrenando.

Al discurrir buena parte de la prueba por la playa y dunas, decidí usar las polainas de Decathlon. No es una solución perfecta, pero evitará que me entre tanta arena como en años anteriores. Para conseguir aislar más las zapatillas es necesario coserle un velcro a las propias zapatillas, en la zona lateral por encima de la suela, y utilizar polainas como las de Raidlight. Tampoco las voy a usar tanto por arena, así que desheché esta idea. A las polainas añadí un paquete de Compeed para evitar que la rozadura fuera a más.

El domingo me levanto temprano, con suficiente tiempo como para desayunar e ir al cuarto de baño. Había quedado con Salva en la recogida de dorsales, pero de camino a San Fernando me llama y me pide que le recoja el dorsal ya que llegará justo de tiempo.

Dorsal recogido y mochila preparada
Dorsal recogido y mochila preparada

La experiencia de las ediciones anteriores me hace plantearme los avituallamientos de forma distinta. Iré rellenando los bidones pequeños y reservando el agua de la mochila para los geles. El año pasado perdí mucho tiempo en los primeros avituallamientos sacando el camelback y llenándolo muy poco por estar prácticamente lleno. La toma de geles la planteo cada 7km, (será que «El gel del km 7» ha calado en mí), con 3 geles normales y 2 con cafeina.

Antes de las 8:00 ya tengo recogidos los dorsales. Le entrego a Salva el dorsal cuando llega y me coloco las polainas, antes de dirigirnos a la salida. No somos muchos corredores así que es fácil colocarse en una zona intermedia. Tras una breve charla técnica, de agradecer aunque desgraciadamente no todo el mundo está atento, comienza la carrera.

Con Salva, antes de empezar la carrera (Foto: ErManue)
Con Salva, antes de empezar la carrera (Foto: ErManue)

Empieza la carrera y acoplo mi ritmo con idea de ir cómodo y aguantar el máximo de kms corriendo. En el primer km me despido de Salva, que va más fuerte, para continuar a mi ritmo. La zona de marismas va alargando el pelotón de corredores y nos permite disfrutar de una temperatura ideal.

Primeros kms con Salva (Foto: ErManue)
Primeros kms con Salva (Foto: ErManue)

Tras salir de la zona de marismas enlazamos con un carril bici que nos lleva hasta la Ermita del Cerro de los Martires, para lo cual tenemos que subir un pequeño cerro, con una pendiente bastante dura. En esta ocasión, la subí trotando, a ritmo cómodo pero sin descanso, lo que me permitió adelantar algunas posiciones. Llegué a la parte más alta mejor de lo que esperaba, lo que supuso una inyección de ánimos.

Bajada desde el Cerro de los Mártires (Foto: Ruben Luins)
Bajada desde el Cerro de los Mártires (Foto: Ruben Luins)

Desde este cerro bajamos hacia el acuartelamiento de Camposoto. Aprovecho para tomarme el primer gel antes de entrar en las instalaciones militares. Una pequeña bajada nos recibe hasta llegar a la valla, que bordeamos por la parte interior, buscando la salida hacia la playa. Sigo encontrándome cómodo, aunque aún es pronto para sacar conclusiones. Alternamos carril bici y sendero mientras me imagino la ducha que me voy a pegar al llegar a la playa para refrescarme antes del avituallamiento. La sorpresa es que este año no hay duchas instaladas, por lo que me tuve que conformar con echarme un poco del agua de las garrafas del avituallamiento, menos mal que había de sobra.

En la playa es donde el recorrido varía de la edición del año pasado. Nos dirigimos a la derecha, hacia la playa prohibida, zona militar y de acceso restringido. Sigo encontrándome bastante fresco de piernas al ritmo que llevo, aunque el ir solo todo el rato hace más tedioso el recorrido, sólo la música consigue salvarme de la rutina. Me cruzo a Salva, que continúa a buen ritmo y nos animamos. Llego a un nuevo punto de control y doy la vuelta para salir de la zona militar, buscando la Punta del Boquerón. Me tomo un nuevo gel en los 14km y al salir de la zona militar aprovecho un nuevo punto de avituallamiento para refrescarme. Intento que las paradas sean lo más rápidas posibles y así ahorrar minutos.

Llegando a la Punta del Boquerón
Llegando a la Punta del Boquerón

Hasta ahora la arena es compacta, pero a partir de los bunkers se va haciendo más inestable conforme llegamos al final de la playa. A partir de los 16km ya he parado a andar algún tramo, pero aún así, mantengo un buen ritmo medio mientras la arena lo permite. Intento dar varias zancadas, pero mis pies se clavan en la arena. No me veo con fuerza para aguantar aproximadamente 1km corriendo en este terreno.

Castillo de Sancti Petri al fondo
Castillo de Sancti Petri al fondo

El siguiente avituallamiento se encuentra poco antes de la entrada a las dunas. Una zona donde para mí es imposible correr. Los pies se hunden ya hasta el tobillo por lo que decido tomarme un respiro, más largo de lo deseado, que aprovecho para tomar un nuevo gel a los 21km. Continúo andando hasta el avituallamiento y después hasta la entrada en las dunas.

Ya en las dunas se me hace más pesado el calor que las propias dunas. Me siento más cómodo corriendo por aquí ya que el pie no se hunde tanto, aunque los desplazamientos son más laterales. Llevo buen ritmo, casi sin parar, adelantando a varios corredores de los Susmurais. Las polainas, sin evitar totalmente la entrada de arena, cumplen de forma más que satisfactoria su funcion. Aunque tengo algo de arena, no es necesario sacudir las zapatillas. El año pasado sentía la presión de la arena dentro de la zapatilla y tuve que parar al final de las dunas a sacudirlas.

Tras dejar las dunas, vuelta a la playa, agradeciendo la brisa, inexistente en este último tramo. La playa está llena de gente y recibo los ánimos de varias personas, aunque de buena gana cambiaría la carrera por tumbarme en una toalla. Hace calor y apetece un baño, pero ya he superado más de la mitad del recorrido y me veo bien.

Abandono la playa, no sin antes beber y recargar los bidones en el avituallamiento. A partir de aquí comienza un tramo que para mí es el más duro, el carril bici de vuelta. Son unos 3km a pleno sol, por un carril bici sin más compañía que mi propia sombra. Este tramo puede conmigo y lo hago casi entero andando. Intento animarme un poco tomándome el primer gel con cafeina, dejando el más concentrado para un posible desfallecimiento final.

Salimos del carril bici para llegar al último avituallamiento en la entrada de las marismas, un pequeño oasis antes de llegar a meta. De aquí, según el recorrido de años anteriores, se bordéa de nuevo las marismas por el carril bici, otro pequeño infierno ya que es una curva que se hace interminable. Pero una agradable sorpresa me espera, el recorrido se hace por las marismas en lugar del carril bici.

Ultimos 5km por las marismas
Ultimos 5km por las marismas

Aunque la distancia es similar, el hecho de correr por senderos supone una importante inyección de moral. Empiezo a correr y prácticamente no me paro hasta llegar a meta. Aunque el ritmo está entre los 6:30-7:00min/km, me siento con muchas fuerzas. Paso a varios corredores e intento contagiar la euforia que me invade. Al grito de «trotando se llega antes que andando» logro que algunos me acompañen un rato, pero no tardo en dejarlos. Llevo un buen ritmo y disfruto de estos últimos kms, no siendo necesario tomarme el último gel concentrado de cafeina, voy sobrado de ánimos.

Enfilo la meta con la satisfacción del trabajo realizado, bastante mejorable, pero realizado a fin de cuentas.

Medalla de finisher del Trail 7 Playas 2016
Medalla de finisher del Trail 7 Playas 2016

Como conclusión, decir que poco a poco me voy dando cuenta que muchos de mis bajones en carreras largas son más mentales que físicos. El tramo final es prueba de ello, así como la subida al cerro de los mártires, que otros años pensaba que no podía subir corriendo. Completé los 35km en un tiempo de 4h29min, con una media de 7:54min/km y unas pulsaciones de 161ppm.

A pesar de las buenas sensaciones finales, los tiempos medios así como los porcentajes de tiempo andando, trotanto, corriendo no han sido mejores que los de la edición del 2015. El único punto en el que he mejorado es en lo referente a frecuencia cardiaca, lo que considero que es muy positivo.

Gráfica de los tramos andar/trotar/correr
Gráfica de los tramos andar/trotar/correr

De hecho, el resumen en porcentajes ha sido peor. Desde luego, la irregular preparación y el incremento de la distancia no ha ayudado, pero me quedo con el sabor agridulce. Por un lado he disfrutado de gran parte del recorrido, pero el terreno irregular me penaliza mucho, especialmente el tramo de la Punta del Boquerón.

Resumen de porcentajes andar/trotar/correr
Resumen de porcentajes andar/trotar/correr

Esto no hace más que incrementar las ganas que tengo de volver a disputar esta prueba, pero antes hay muchas paradas intermedias que hacer y mucha preparación que realizar.

Espero que os haya gustado mi crónica, si os ha parecido interesante podéis compartirlar en las redes sociales así como realizar cualquier comentario sobre la misma. Como muestra de la carrera un nuevo video resumen de la misma, así como la Suunto Movie.


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